lunes, julio 26, 2010

Elementos




Elementos
A Pablo Neruda

Amanece y eres mar
y no oleaje.
No dentro de ese abismo profundo y oscuro,
sino aislado componente y único,
incomparable y maldito,
solo en tus sueños,
y en tus incendios.

Amanece poeta y eres siempre
composición de lluvia
y llanto.
A veces viento,           
incandescente, irremediable.

Eres bosque
y tierra,
fragilidad chispeante,
estrellas en el ocaso.

Neruda,
bajo tu abismo,
y tu crepúsculo
crecen y se quedan en el olvido
los sauces,
absurdo mundo.


Poeta fuiste de la calle,
amanece y ya no estás
Neruda,
qué triste se queda todo.

A veces siento un infinito
aquí en mi pecho, tan grande,
a veces cuando tú sonríes y silbas
y te conviertes en viento.

© Virginia Fernández “Elementos”

viernes, julio 09, 2010

Palabra de mujer


38
Este canto arrepentido, vigía detrás de mis poemas'
este canto me desmiente, me amordaza.

-Alejandra Pizarnik-


A
 veces me gustaría callar
dentro de este mar oscuro de ideas arrepentidas,
mordazas del pensamiento,
lúgubres palabras, como el pensamiento de un loco.

A veces me gustaría calmar estos gritos
y que no fueran más que danzas en la noche,
hogueras saltarinas escribiendo la palabra carcelero,
extraño lenguaje.

Sería magnífico que las palabras fluyeran
con ese leve aleteo de una mariposa
o el agua que baja de un manantial.

Pero la palabra correcta es la que juega
desde lo impuesto,
desde vuestro lado intachable
de pajarita o corbata,
pequeña danza del “azar” premeditado.

A veces me gustaría callar
para que pudieras expresarte,
pensamiento libre de mujer,
sin trabas,
sin extorsiones,
sin subrayado,
palabra de mujer,
triste y silente.

© Virginia Fernández “Palabra de mujer”

sábado, julio 03, 2010

Soledades




T
odos somos pequeñas islas,
de las que queremos huir,
con paredes,
con sueños y miedos,
gustos y tacto.

Trabajamos en sueños,
avanzamos
como amantes
que caminan paso a paso,
muertos de miedo.

Somos pequeños universos
llenos de miles y millones
de partículas de pensamientos,
de infinitas soledades,
de individualismos.

Somos tan locos
que avanzamos hacia la nada
con ansias de luz,
luciérnagas ciegas,
creyendo vivir.

© Virginia Fernández “Soledades”